Los desastres son frecuentes, solo escuchando las palabras de Dios podremos ser protegidos por Él

 ¿Sabes por qué los demás murieron salvo las ocho personas de la familia de Noé protegidas por Dios cuando Él destruyó al mundo con diluvio? Es porque no escucharon las palabras de Dios, incluso si oyeron las palabras de Dios transmitidas por Noé, ni creyeron en ellas, ni dieron importancia a Su advertencia. Solo se enfocaron en comer, beber, jugar y disfrutar y codiciaron los placeres de la carne, al final, ofendieron el carácter de Dios y fueron destruidos por Dios en la inundación. Ahora que estamos en los últimos días, los desastres ocurren con frecuencia, y las profecías de la venida del Señor se han cumplido básicamente. El Señor ha regresado, ha expresado la verdad y ha hecho una nueva obra. Pero ¿de qué manera debemos tratar la obra de Dios? Muchas personas solo se concentran en la vida de la comodidad de la carne como las de la época de Noé, nadie busca la aparición y la obra de Dios, e incluso si escuchan la noticia del regreso del Señor, no toman la iniciativa de buscar e investigar. Dios todavía tiene compasión para nosotros y nos está esperando, y usa los desastres para advertirnos y despertar nuestro corazón entumecido. Solo aprovechando esta oportunidad para escuchar las palabras de Dios y siguiendo los pasos del Cordero, podremos tener la chance de ser protegidos por Él.

Tal como Dios dice: “Después, mira la era presente: hombres tan justos como Noé, que podían adorar a Dios y apartarse del mal, han dejado de existir. Aun así Dios sigue siendo misericordioso con esta humanidad, y la absuelve durante esta era final. Dios busca a aquellos que anhelan que Él aparezca. Busca a aquellos que son capaces de oír Sus palabras, los que no han olvidado Su comisión y le ofrecen su corazón y su cuerpo. Él busca a aquellos que son tan obedientes como bebés delante de Él, y no se resisten a Él”.

Haz clic para escuchar el himno de la Palabra de Dios “Prestad atención al destino de la humanidad”.


Para conocer más: Qué es la salvación

No hay comentarios:

Publicar un comentario