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La palabra de Dios Todopoderoso | Dios mismo, el único (VIII) Dios es la fuente de vida para todas las cosas (II)parte 4





Al principio hablamos acerca del entorno de vida de la humanidad y de lo que Dios hizo, preparó y con lo que trató para este entorno, y también hablamos de las relaciones entre todas las cosas que Dios preparó para la humanidad y cómo se ocupó Él de esas relaciones para evitar que todas las cosas le causaran perjuicio al hombre. Dios también se ocupó de los diversos elementos implicados en todas esas cosas, así como de las influencias negativas que pudiesen tener sobre el entorno de la humanidad, permitió que todas las cosas maximizasen sus funciones, trajo a la humanidad a un entorno favorable, e hizo beneficioso cada elemento, a fin de que el hombre se pudiese adaptar al mismo y continuar con normalidad el ciclo de reproducción y vida. Después estaba la comida necesaria para el cuerpo humano: la comida y la bebida diarias que también es una condición necesaria para la supervivencia de la humanidad. Es decir, el cuerpo humano no puede vivir tan sólo respirando, sólo con la luz del sol o con el viento, o sólo con temperaturas adecuadas; también necesita llenar su estómago. Dios también ha preparado totalmente estas cosas para llenar el estómago de la humanidad: esta es la fuente de los alimentos del hombre. Después de ver estos productos ricos y abundantes, las fuentes de comida y bebida de la humanidad, ¿puedes decir que Dios es la fuente de la provisión para la misma y para todas las cosas? Puedes afirmarlo rotundamente. Si Dios sólo hubiese creado los árboles y la hierba, o diversos seres vivientes cuando creó todas las cosas, y el hombre no hubiese podido comer ninguno de ellos, ¿habría podido sobrevivir la humanidad hasta ahora? Y si las diversas cosas vivientes y las plantas, entre todas las cosas creadas por Dios, fuesen únicamente para alimentar al ganado, a las ovejas, a las cebras, a los ciervos y a otra diversidad de animales (por ejemplo, los leones comen cebras y ciervos, los tigres comen corderos y cerdos) pero no hubiera ni una sola cosa adecuada para el consumo de los seres humanos, ¿funcionaría esto? No. Si fuera así, la humanidad no podría seguir sobreviviendo. ¿Y si los seres humanos solamente comieran hojas? ¿Funcionaría? El estómago humano no podría tolerarlo. No lo sabrás si no lo intentas, pero una vez lo hagas lo tendrás muy claro. ¿Podrías comer el pasto preparada para el ganado y las ovejas? Quizá podría aceptarse si sólo pruebas un poco, pero si la sigues consumiendo a largo plazo, no durarás mucho. Los animales pueden comer algunas cosas que envenenarían a los seres humanos si las comieran. Hay algunas cosas venenosas que los animales pueden comer sin que les afecte, pero los seres humanos no pueden hacer lo mismo. Fue Dios quien los creó, por lo que Él sabe mejor que nadie los principios y la estructura del cuerpo humano y lo que este necesita. Él tiene perfectamente claro cuál es su composición y su contenido, lo que necesita, y cómo sus órganos internos funcionan, absorben, eliminan y metabolizan. Las personas no lo tienen tan claro y, en ocasiones, comen y se suplementan ciegamente. Se suplementan demasiado y acaban provocando un desequilibrio. Si comes estas cosas que Dios preparó para ti, y las comes y disfrutas de ellas con normalidad, todo funcionará correctamente en ti. Incluso si en ocasiones tu estado de ánimo es malo y sufres una hemostasia, no importa. Sólo debes comer cierto tipo de planta y el problema se eliminará. Dios ha preparado todas estas cosas. A Sus ojos, la humanidad está muy por encima de cualquier otro ser viviente. Dios preparó entornos de vida para toda clase de plantas y preparó alimentos y entornos vitales para toda clase de animales, pero sólo los requisitos de la humanidad hacia su propio entorno de vida, son los más estrictos e intolerantes con los descuidos. De lo contrario, esta no podría seguir desarrollándose, reproduciéndose y viviendo normalmente. Dios lo sabe muy bien en Su corazón; cuando Él hizo esto, atribuyó mayor importancia en ello que en cualquier otra cosa. Quizás seas incapaz de sentir la importancia de algo insignificante que ves y de lo que disfrutas, o de algo con lo que sientes que has nacido y que puedes disfrutar, pero Dios ya lo había preparado para ti hace mucho tiempo, Él ha eliminado y resuelto, en el mayor grado posible, todos los factores negativos que no son favorables a la humanidad y que pueden perjudicar al cuerpo humano. ¿Qué deja esto en claro? ¿Deja clara, esta vez, la actitud de Dios hacia la humanidad cuando la creó? ¿Cuál fue esa actitud? Su actitud fue rigurosa y seria, y no toleró la interferencia de ningún factor, condición o fuerzas enemigas aparte de Dios. A partir de esto, puedes ver la actitud de Dios cuando creó a la humanidad y la gestiona esta vez. ¿Cuál es la actitud de Dios? Podemos percibirla en el entorno de vida y de supervivencia que la humanidad disfruta, así como en su comida, su bebida y sus necesidades diarias; también podemos verla en Su mantenimiento de la reproducción y la vida de la humanidad, en la responsabilidad que tiene hacia ella y en Su determinación para salvarla esta vez. ¿Podemos ver la autenticidad de Dios a través de estas cosas? ¿Podemos ver lo maravillo que es? ¿Podemos ver lo insondable que es? ¿Podemos ver Su omnipotencia? Dios simplemente usa Su forma todopoderosa y sabia para proveer para toda la humanidad y para todas las cosas.