Canciones cristianas | Los que aceptan la obra nueva son benditos
Bienaventurados son los que pueden obedecer
las actuales declaraciones del Espíritu Santo.
No importa cómo solían ser,
o cómo el Espíritu Santo solía obrar dentro de ellos.
Bendecidos son los que han obtenido la última obra,
y hoy, los que no la han podido seguir son eliminados.
Dios quiere a los que pueden aceptar la nueva luz,
y a los que aceptan y conocen Su última obra.
¿Por qué debéis ser una virgen casta?
Una virgen casta puede buscar la obra del Espíritu Santo,
y entender las cosas nuevas, y desechar las antiguas concepciones,
y obedecer hoy la obra de Dios.
A estas personas que aceptan la nueva obra de la actualidad,
Dios las eligió cuando el mundo empezó, y son las más bendecidas.
Vosotros oís Su voz y contempláis Su aparición,
así que, en todos los tiempos, y en todo el cielo y la tierra,
nadie ha sido más bendecido que vosotros.
De "La Palabra Manifestada En Carne"
Dios Todopoderoso dice :"Al escuchar estas palabras, ¿cuál es la reacción dentro de vosotros? Después de haber creído durante todos estos años, ¿tienes las palabras de Dios como tu vida? ¿Ha habido un cambio en el carácter corrupto que tenías antes? ¿Sabes, de acuerdo con las palabras actuales de Dios, qué es tener vida y qué es no tener vida? ¿Esto os queda claro a vosotros? De importancia primordial al seguir a Dios es que todo debe ser de acuerdo a las palabras actuales de Dios: Ya sea que estéis buscando la entrada a la vida o el cumplimiento de la voluntad de Dios, todo se debe centrar alrededor de las palabras actuales de Dios. Si lo que comunicas y en lo que buscas entrar no se centran alrededor de las palabras actuales de Dios, entonces eres un extraño a las palabras de Dios y estás completamente carente de la obra del Espíritu Santo. Lo que Dios quiere son personas que sigan Sus pisadas. No importa qué asombroso y puro sea lo que hayas entendido antes, Dios no lo quiere y si no puedes hacer a un lado esas cosas, entonces en el futuro serán un obstáculo tremendo para tu entrada. Todos los que pueden seguir la luz presente del Espíritu Santo son benditos. Las personas de épocas pasadas también siguieron las pisadas de Dios, pero no pudieron continuar hasta hoy; esta es la bendición de las personas de los últimos días. Los que pueden seguir la obra presente del Espíritu Santo y que pueden seguir las pisadas de Dios, de tal manera que sigan a Dios dondequiera que Él los guíe, estas son las personas a las que Dios bendice. Los que no siguen la obra presente del Espíritu Santo, no han entrado en la obra de las palabras de Dios y, no importa cuánto trabajen o cuán grande sea su sufrimiento o cuánto corran, nada de esto quiere decir algo para Dios y Él no los elogiará. En la actualidad, todos los que siguen las palabras actuales de Dios están en la corriente del Espíritu Santo; los que son extraños a las palabras actuales de Dios están fuera de la corriente del Espíritu Santo y a tales personas Dios no las elogia. El servicio que está divorciado de las declaraciones actuales del Espíritu Santo es un servicio que es de la carne y de las concepciones y no puede estar de acuerdo con la voluntad de Dios. Si las personas viven entre las concepciones religiosas, entonces no pueden hacer nada que sea digno de la voluntad de Dios y aunque sirvan a Dios, sirven en medio de su imaginación y de sus concepciones y son totalmente incapaces de servir de acuerdo con la voluntad de Dios. Los que no pueden seguir la obra del Espíritu Santo no entienden la voluntad de Dios y los que no entienden la voluntad de Dios no pueden servir a Dios. Dios quiere un servicio que sea conforme a Su corazón; no quiere un servicio que sea de las concepciones y de la carne. Si las personas no pueden seguir los pasos de la obra del Espíritu Santo, entonces viven en medio de concepciones y el servicio de tales personas interrumpe y perturba. Tal servicio va en contra de Dios y así, los que no son capaces de seguir las pisadas de Dios no pueden servir a Dios; los que no pueden seguir las pisadas de Dios con mucha seguridad se oponen a Dios y no son compatibles con Dios. “Seguir la obra del Espíritu Santo” quiere decir entender la voluntad de Dios hoy, poder actuar de acuerdo con los requisitos actuales de Dios, poder obedecer y seguir al Dios de hoy, y entrar de acuerdo con las nuevas declaraciones de Dios. Sólo alguien así sigue la obra del Espíritu Santo y está en la corriente del Espíritu Santo. Tales personas no sólo pueden recibir la alabanza de Dios y pueden ver a Dios, sino que también pueden conocer el carácter de Dios en Su última obra y, por Su última obra, pueden conocer las concepciones del hombre y su desobediencia y la naturaleza y esencia del hombre; además, pueden poco a poco lograr cambios en su carácter durante su servicio. Sólo personas como estas son las que pueden ganar a Dios y las que genuinamente han encontrado el camino verdadero. A los que la obra del Espíritu Santo elimina son personas que no son capaces de seguir la última obra de Dios y que se rebelan contra la última obra de Dios. Que esa gente abiertamente se oponga a Dios se debe a que Dios ha hecho una nueva obra y a que la imagen de Dios no es la misma a la que tiene en sus concepciones, como resultado de esto abiertamente se opone a Dios y pronuncia una sentencia contra Él, lo que la lleva a que Dios la aborrezca y la rechace. Tener el conocimiento de la última obra de Dios no es una tarea fácil, pero si la gente puede, de manera intencional, obedecer la obra de Dios y puede buscar la obra de Dios, entonces tendrá la oportunidad de ver a Dios y tendrá la oportunidad de obtener la nueva guía del Espíritu Santo. Los que de manera intencional se oponen a la obra de Dios no pueden recibir la iluminación del Espíritu Santo o la guía de Dios; por lo tanto, que la gente pueda o no recibir la última obra de Dios depende de la gracia de Dios, depende de su búsqueda y depende de sus intenciones." ("La Palabra manifestada en carne")
Fuente: Iglesia de Dios Todopoderoso
No hay comentarios:
Publicar un comentario